Este es quizás el tema más complejo e importante de entender para los managers novatos (y no tan novatos) porque han existido infinidad de rumores y bulos que se han propagado sin comprobarlos o demostrarlos.
Lo único que se sabe a ciencia cierta es que estamos ante un atributo del jugador que indica su potencial de subida de características. Es en realidad una característica del jugador del mismo modo que lo pueden ser la velocidad o el tiro. Habitualmente se identifica como la velocidad a la que sube un jugador o con la media que puede alcanzar y, aunque está claramente relacionado, no se puede decir que sea solo eso.
Progresión como ya he dicho es el atributo que indica el potencial de subida. Su valor es totalmente secreto y no hay forma de saber en realidad a cuanto asciende en cada jugador. Mediante búsquedas del secretario técnico o el ojeador podemos acotar el mínimo deseado, pero nunca sabremos la cifra exacta. Yo suelo pensar en esta variable como la velocidad inicial en un movimiento parabólico. Si un jugador tiene de progresión inicial 90 parte con mayor empuje de salida y por tanto subirá más deprisa y más alto que otro con menor valor. Y como es lógico, el punto de partida también es importante. Es corriente leer en el foro a gente explicando que la progresión hará que tu jugador llegue rápido a su media máxima y que ese tope no depende de la progresión. Esto es falso. La progresión determina la media que un jugador puede alcanzar y es muy complejo que consigamos subirlo con entrenamientos.
La progresión afecta a diversos factores del juego. La mejor forma de ver la progresión es en la gráfica de previsión, puesto que la forma de dicha gráfica está totalmente relacionada con esto además de con la media de inicio.
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